domenica 28 settembre 2014

Egidio, el granjero de Ham / Hoja de Niggle / El herrero de Wooton Mayor, prima edizione castigliana 1981



Egidio, el granjero de Ham / Hoja de Niggle / El herrero de Wooton Mayor
di J.R.R. Tolkien
Traduzione di Julio César Santoyo e José M. Santamaria
Minotauro, Barcellona, 1° ed. 1981, pp. 144
Illustrazione di copertina di Joan Pedragosa
Cartonato con sovraccoperta

Note di copertina
Egidio, el granjero de Ham, presunta traducción de un manuscrito en latín insular que cuenta los orígenes del Pequeño Reino, fue publicada en 1949. Tolkien había concluido hacía poco El Señor de los Anillos, y Egiio es en muchos sentidos un anticlímax paródico en el que reaparecen -a veces como una broma erudita- la parafernalia caballeresca de El Hobbit y la trilogía, la insensatez y la vanidad de los poderosos, y el ascenso de un hombre común, "madiano" y sin ambiciones que llega a ser rey por los azares de una aventura. Como Bilbo, como Frodo, o como Sam, Egidio es un auténtico antihéroe.
Hoja de Niggle, escrita en 1939 en la pausa que siguió a la redacción de los primeros nueve capítulos de El Señor de los Anillos, cuenta la vida y muerte de un artista, pero es también una inspirada ejemplificación de una de las ideas fundamentales de Tolkien, la necesidad de que la obra de arte tenga "la consistencia interior de la realidad". La pereza, la falta de firmeza de Niggle, son transformados "del otro lado del túnel" en prontitud, orden, servicio, lo que cambia a la vez la visión fugaz del artista en "subcreación" o creación derogada. La "Hoja" de Niggle es así parte de lo que Tolkien llama el Árbol de los Relatos, de follaje innumerable, en el que cada hoja es todas las hojas.
El herrero de Wooton Mayor, el último de los cuentos que escribió Tolkien, apareció por primera vez en 1967, y es de algún modo la historia de una emoción terminal, la de quien en vida ha visitado a menudo tierras misteriosas y descubre ahora la proximidad d ela muerte. La conjunción benéfica del mundo de la fantasía y el mundo de los hombres se consigue y se pierde en una transimisión de poderes.